miércoles, 23 de marzo de 2011

SOY MIA



Hoy Marta y Esperanza son felices. Viven en la tranquila floresta cercana a Tresplaceres, rodeadas del afecto de propios y extraños, insertas como la pieza adecuada del rompecabezas en su sitio perfecto, bien adaptadas, miran  por la ventana y ven más allá de sus narices.
Las flores en el prado frente a su casa tienen esa belleza que solo poseen las flores abisqueñas. La casita misma parece sacada de las ilustraciones de un cuento infantil: aquí el tiempo se detuvo en una trepidación de amor.
En tardes veraniegas de sol y vientos perfumados ellas van por la vereda, tomadas de la mano, dándose besos enamorados mientras algún vecino sonriente las contempla arrobado y las obsequia con flores, confites o un poema.
La dulce sonrisa en el rostro de todos corrobora la dicha de vivir como vivimos y la naturaleza misma, tan intimamente entreverada con las construcciones y las calles, parece vibrar con benevolencia y armonía.
Por mi parte esta noche me coronaré de flores y vestiré mi túnica transparente.
Armada con mi antigua arpa iré hasta su jardín para entonar mis suaves canciones de amor y lujuria, de fantasía ,hadas y magia. Es lo que siempre hago en las noches de luna llena desde cuando ellas llegaron a vivir aquí.
Algunas veces abren la ventana de su dormitorio y me permiten observar como se aman. En otras ocasiones danzan conmigo en el jardín y de vez en cuando me invitan a su alcoba y allí adoramos al amor hasta la madrugada.
Yo soy feliz cuando por las mañanas bebo miel y ambrosía en las fuentes públicas y algún adolescente tierno me recuerda con sus caricias que estoy viva y aún tengo muchos años por delante para gozar de todos los aromas, sabores, sonidos y colores, porque poseo vitalidad, soy bella, pero ante todo porque...soy mía.


2 comentarios:

pixel dijo...

Leonardo, tenías razón me ha gustado mucho. Es una historia fresca y alegre.

Ah, y la imagen que has acompañado me encanta. Es de estilo naif, ¿no?

Un abrazo

leonardo asimov dijo...

Lo del estilo de la ilustración no te lo sé decir. Me gustó por su colorido muy tropical y el sentido relajado y feliz que tienen las dos mujeres, que parecen muy próximas. Cuando busco ilustraciones para las historias suelen ocurrirme sincronismos como los que describe Deepak Chopra en Sincrodestinos. Mi cerebro-imán atrae una o varias imágenes que se ajustan más o menos a lo que quiero. Respecto a la historia, me fascinaría vivir en un sitio como ese, tan libre y desprejuiciado. Tan romántico e idílico, tan lleno de flores y poesía. Dicen que con nuestra imaginación creamos la realidad....es lo que intento.Besos.